Un vistazo a Windows 8

Microsoft lanzó hace unos días la versión preliminar para consumidores de Windows 8, su nuevo sistema operativo.

El gigante de software se sube así al tren de la era post-PC, ofreciendo una plataforma basada en apps como ya lo hacen Apple con OS X y Ubuntu con Unity.

Pero el que la empresa que controla al menos el 70% del mercado de sistemas operativos dé un giro de 180 grados en su principal programa, nos permite echarle un vistazo al futuro.

Y tras una semana de probar Windows 8 aquí les va mi veredicto, acompañado de imágenes. ¿Tienen las rosetas de maíz listas?

Instalación

Aquellos con Windows 7 pueden bajar e instalar la versión preliminar, pero sean advertidos de que no hay marcha atrás. Una vez instalado, para regresar a Windows 7 hay que reinstalar el sistema; advertidos están.

Entre que Microsoft analizaba mi computadora e instalaba lo necesario, pasaron una hora y 20 minutos antes de que pudiera ver en mi pantalla el nuevo sistema operativo.

Lo primero que salta a la vista es que esta no es una versión de Windows, es un nuevo Windows.

Inicio

Lo que más llama la atención es la nueva pantalla de Inicio.

Hay que olvidarse de lo que se sabe del sistema y de bajo que lógica funciona pues el mundo de las ventanas ha cambiado radicalmente para convertirse en un mundo de mosaicos vivos.

La interfaz conocida como Metro es la misma que existe en los teléfonos Windows Phone así que para sus usuarios será fácil adaptarse, no así para el resto de los mortales.

En esta pantalla están las apps (hablaremos de éstas más adelante) favoritas del usuario. Por supuesto Microsoft aprovecha para tirar ahí Internet Explorer, Xbox Live, mapas de Bing y Sky Drive, entre otros de sus servicios.

Pero es fácil deshacerse de los que no son de nuestro agrado. Basta con hacer un clic y seleccionar "Desprender de la pantalla de Inicio" para que su lugar quede vacante y pueda ser reemplazado.

Los mosaicos vivos

Windows 8 piensa como un teléfono inteligente o como una tableta. Las apps de la pantalla de inicio están vivas y funcionan como los "widgets" de los teléfonos Android, de Google. Es decir, se conectan a internet y muestran información en tiempo real como el clima, qué correos electrónicos hemos recibido, nuevas fotos de contactos, y citas en el calendario.

Microsoft intentará -a juzgar por esta versión de prueba- que la gente utilice cuentas registradas con ellos en línea -tal cual hace Google con Android, Apple con iOS- para usar el sistema. Sepan que esto no es obligatorio. Uno puede tener una cuenta local -instalada sólo en la máquina- y hacer que funcione perfectamente. Las apps de correo, calendario y contactos, por ejemplo, pueden vincularse a una cuenta de Google o Yahoo,

Algunas apps, sin embargo, no funcionarán sin una cuenta de Microsoft. Particularmente Música, Videos y Sky Drive. Se puede vivir sin ellas si no quieren registrarse.

Al principio puede resultar complicado configurar algunas de ellas. A mi, por ejemplo, me tomó un rato cambiar de grados Farenheit a centígrados en la aplicación del clima como pueden ver abajo.

¿Dónde están mis programas?

El primer ataque de pánico ocurre cuando uno no sabe cómo demonios acceder a los programas instalados en la computadora más allá de las apps iniciales. Quienes son usuarios avanzados harán clic con el botón derecho del mouse y descubrirán lo listos que son. El resultado: un mini ícono en la parte inferior de la pantalla que dice "Todas las apps". Harán clic en el y... ¡voilá! aparecerán todos sus programas. Eso sí, en la era Windows 8 uno se mueve -y mucho- en forma horizontal.

Los usuarios expertos se reirán de los que hicieron clic con el botón derecho del mouse. Ellos simplemente comenzarán a escribir el nombre del programa "Skype", por ejemplo, y verán como aparece mágicamente en un resultado de búsqueda sin necesidad de mouse ni teclado.

Los más principiantes buscarán usar el ratón a cualquier precio y sufrirán durante un buen rato. Detengan su agonía. Basta con pasar el mouse por la esquina inferior derecha para que un mágico menú se abra. Este será su mejor amigo en su viaje por las tierras de Windows 8. Y viene con un ícono llamado "Apps"... maravilla.

¿Y mi botón de Inicio? ¿Dónde está el logo de Windows?

Se fue, no existe más, olvídense de él. Este es un nuevo sistema operativo y, nos guste o no, no cuenta más con dicho botón.

Lo más cercano es el ícono de Inicio que se encuentra pasando el mouse por la esquina inferior izquierda.

Hay, claro, un hack. Alguien programó una app que añade de regreso el botón como un atajo a todos los programas.

Pero pregúntense: si lo necesitan ¿entonces para que instalar Windows 8? Es una nueva plataforma. Punto.

No es a prueba de gatos

Cuando configuraba una nueva cuenta en Windows 8 fui a preparame un café y dejé la computadora sin vigilancia. Grave error.

Windows 8 y los gatos no se llevan. O, si se llevan, se hablan en japonés.

Cuando regresé de la cocina, mi gato -cuyo cuerpo estaba a la mitad del teclado contemplando la pantalla- salió despavorido. Yo me senté y descubrí que la mitad de los mosaicos vivos estaban en japonés. No uno, no todos. Sólo la mitad.

Traté de cambiar la configuración, de mirar las entrañas del sistema, nada valió. Las apps estuvieron hablando japonés durante tres días. Después como mi gato no regresó, se olvidaron solas del idioma y volvieron a la normalidad como por arte de magia.

La navegación Post-PC

Microsoft quiere crear un sistema que se pueda usar tanto en computadoras de escritorio como en dispositivos móviles. Y es verdad que Windows 8 puede usarse con un mouse y un teclado, pero es claramente más sencillo en una pantalla táctil.

La navegación horizontal en los programas y menús, por ejemplo, es mucho más fácil de ejecutar arrastrando el dedo que haciendo múltiples clic con el mouse en la barra de navegación.

Los amantes del mouse deberán aprender que Windows 8 funciona con una nueva característica llamada "Hot corners". Eso significa que cuando se arrastra el mouse por las esquinas o los lados de la pantalla, aparecen atajos a menús y aplicaciones.

En la esquina superior izquierda, por ejemplo, se esconde la última aplicación abierta. En la inferior izquierda, un atajo a la pantalla de Inicio.

Pasar el mouse por el lado izquierdo muestra una lista de todas las aplicaciones abiertas. Del lado derecho aparece la barra de los "encantos", probablemente la más importante en Windows 8.

Desde ahí se pueden realizar búsquedas, compartir archivos, abrir la pantalla de inicio, configurar el programa que se tiene abierto y administrar otros dispositivos que se están utilizando.

Las apps

Igual que sus amigos Apple y Google, Microsoft introduce en el nuevo Windows una tienda de aplicaciones llamada... "tienda". Ahí., se pueden instalar o desintalar apps creadas por Microsoft u otras empresas, igual que se hace en un teléfono inteligente o tableta.

Por el momento son "versiones preliminares", por lo que es de esperar que aún tengan una que otra falla y que la oferta no sea muy grande. Pero el concepto está ahí y es claro que será parte fundamental de la experiencia de Windows 8.

Y el resto de los programas que no son apps funcionan igual que en otras versiones de Windows, aunque todas se e ncuentran enlistadas bajo el menú "Apps".

En resumen

El nuevo sistema operativo representa un cambio fundamental en la vida de Windows y una clara apuesta por dejar atrás la PC. Esa es una intención muy fuerte, viniendo de la empresa que domina el mercado de las computadoras de escritorio y que ve como Apple con las tablets y Google con los teléfonos ineteligentes, están dominando dichos mercados.

Pero el cambio es radical y será difícil para una buena parte de los consumidores acostumbrarse a él. Microsoft deberá poner mucho cuidado en enseñarles claramente cómo usar la nueva plataforma.

Sin embargo, la mira de Windows 8 está en el mercado empresarial que ahora domina, pero que se ha entusiasmado con el uso del iPad de Apple. Microsoft espera convencerlos de que el nuevo Windows será la perfecta opción para sincronizar sus programas e información entre sus escritorios y sus dispostivios portátiles.

La empresa podría lanzar la versión final de Windows 8 en octubre de este año. La pregunta es ¿llega demasiado tarde al mercado móvil?